Percy Jackson y la batalla del laberinto

En la última entrada, dije que cuando me leyera el cuarto y el quinto de Percy Jackson y los dioses del Olimpo, escribiría sobre ellos.

Hace poco he terminado Percy Jackson y la batalla del laberinto, también escrito por Rick Riordan y en editorial Salamandra.

Luke, un chico que estaba anteriormente en el campamento pero que se pasó al bando de Cronos, un titán, quiere invadir el campamento a través del laberinto, una construcción de Dédalo que es inmensa y está construida para engañarte, y Percy sueña con eso. Para guiarse por el laberinto, Luke debe encontrar a Dédalo para pedirle que le guíe por el laberinto. Así, Annabeth, Grover, Tyson y Percy se meten en el laberinto para encontrar a Dédalo antes que Luke y pedirle ayuda. Pero no es tan fácil como pensaban porque en el laberinto se encuentran con Campe, una especie de mujer dragón a la que le salen cabezas de animales de la cintura, también se encuentran con Jano, el dios de las dos caras, con la esfinge, que ha cambiado su típica pregunta de: "Por la mañana va a cuatro patas, al mediodía con dos, y al atardecer con tres patas. ¿Qué cosa es?" por un test de veinte preguntas muy fáciles. También van al rancho de Estrigión, en el que Percy tiene que limpiar el establo de unos caballos carnívoros que no se ha limpiado desde hace por lo menos 1.000 años.

Este libro me ha gustado tanto como los demás de Percy Jackson, porque me parece un personaje muy valiente y atrevido. Os lo recomiendo.

Clara.